En lo corrido del año, nos han llamado mucho la atención las campañas que la gente de mercadeo y publicidad de Tigo y Comcel han venido sacando. Por un lado se resaltan equipos y planes y por otro lado beneficios.
En esta esquina tenemos a Tigo, quien ha venido implementando la frase “La telefonía móvil como debe ser”, para acompañar estrategias como “tu saldo no vence” o “tu recarga no vence”:
La verdad hace reír ese "humor bobo" y al menos es algo diferente. Todos hemos sentido cariño y dolor si debemos desprendernos de nuestras “recarguíbiris”. Pero lo más importante es que no se ve como un engaño: Tigo desde el 2009 empezó a promocionar sus valores agregados y logró adelantarse a la reglamentación impuesta -hasta hace poco- por el Gobierno Nacional sobre los deberes de las compañías telefónicas (que ahora están obligadas a no dejar vencer estos valores). Por si fuera poco, Tigo dejó de ñapa este ofrecimiento para que aplique también en servicios pospago, pero ya eso es otro cuento.
El caso es que su publicidad pegó y caló. Incluso, se hicieron merecedores del galardón publicitario Effie®, por su campaña: “¡Compruébalo! ¡La señal de Tigo funciona!”, reconociéndoles con este premio su creatividad y efectividad (al parecer, los Effie®, miden resultados de mercado que probarían su éxito). Además, fueron acreedores del Premio a Campaña del Año 2009, en el concurso Top Ten de la revista de publicidad y mercadeo, P&M, con su campaña de reposicionamiento: “Tigo, la telefonía móvil como debe ser”.
De cualquier manera, la gente recibió bien tanto la promoción, como el servicio ahí ofrecido, pues procuraron –sensatamente- acercarse a las necesidades e inquietudes reales de los usuarios.
En la otra esquina, tenemos la nueva campaña de Comcel: “Cero Estrés”
Sin duda, ha sido muy polémica. ¿Por qué? Básicamente, porque muestran que Comcel hace parte de un estilo de vida sencillo y sin preocupaciones. Infortunadamente, se olvidan por completo de las mil y un manifestaciones que hay en su contra, con respecto a la calidad de su servicio, sus precios, la conexión a Internet, etcétera. Es evidente que la gente está descontenta (ejemplos 01, 02, 03, 04 y 05), de ahí que se llegué a conclusiones sencillas:
Por más ventajas que ofrezcan los comerciales (variedad de planes, cambio de equipo y similares) y por más que gasten en la producción de los mismos, si los consumidores no se sienten identificados, la publicidad no funciona. Tan fácil como eso.
Ya lo dijeron por twitter: “Comcel no es que se haya caracterizado por hacer a más colombianos felices y tranquilos”, de hecho viven estresados gracias a COMCEL... ¡Qué ironía!
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